El gobernador de Nuevo León, Samuel García, solicitó al Congreso estatal un endurecimiento de las penas contra los incendiarios, proponiendo una condena de entre cinco y 15 años de cárcel. García destacó que actualmente es posible que los responsables de incendios obtengan fianza y subrayó la necesidad de modificar la legislación para evitar que los culpables queden en libertad. Además, indicó que esta semana presentarán la propuesta de endurecer las penas, junto con la creación de la Comisión Ambiental Metropolitana.