A partir del 1 de enero entrarán en vigor nuevos criterios para medir la calidad del aire en el estado, como parte de la actualización de normas ambientales enfocadas en proteger la salud de la población. Las modificaciones corresponden a la Norma Oficial Mexicana 172 de la Semarnat, que establece los rangos del “semáforo” de calidad del aire, indicando cuándo el aire se considera bueno, aceptable, malo o extremadamente malo. Sin embargo, las autoridades estatales subrayan que para que estas mediciones sean efectivas es necesario actualizar también la Norma 043, que fija los límites máximos permisibles de emisiones de partículas contaminantes, la cual no se ha revisado desde hace varios años.

Los cambios incluyen límites más estrictos para el material particulado PM2.5 y PM10, que son partículas contaminantes suspendidas en el aire. El PM2.5 corresponde a partículas muy finas que pueden penetrar profundamente en los pulmones, mientras que el PM10 son partículas más grandes que también afectan la salud respiratoria. Con la actualización, el límite diario permitido de PM2.5 pasó de 33 a 25 microgramos por metro cúbico, y el límite anual se mantiene en 10 microgramos. Para el PM10, el límite diario se redujo de 60 a 50 microgramos y el anual de 28 a 20 microgramos, lo que podría generar más días con alertas sobre la calidad del aire, según el Observatorio Ciudadano de la Calidad del Aire de Monterrey.

Las autoridades y especialistas destacan que estas medidas buscan mejorar la protección de la salud y la transparencia sobre la contaminación atmosférica. Actualmente, el Sistema Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA) muestra estaciones con calidad del aire buena y aceptable, pero con los nuevos límites algunos días podrían clasificarse como mala o aceptable. El gobierno estatal trabaja coordinadamente con la Semarnat para garantizar que la actualización del semáforo esté alineada con los límites de emisión de partículas, asegurando que la medición refleje correctamente la situación ambiental real.